Proponen actualizar Salarios Mínimos Profesionales
La Dirección Técnica de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) presentó los primeros avances de la propuesta para la actualización del Sistema de Salarios Mínimos Profesionales (SSMP), con el objetivo de impulsar una recuperación frente a la brecha existente con los salarios mínimos generales.
Propósito de los salarios profesionales
El salario mínimo profesional tiene como objetivo proteger a estos trabajadores que, por la naturaleza de las actividades que desempeñan, tienen más dificultades para negociar incrementos de sueldo, es decir, son más vulnerables en sus remuneraciones.
Las referencias salariales de estos trabajos suelen ser mayores al salario mínimo general porque se tratan de actividades profesionales u oficios.
Las profesiones
Uno de los primeros puntos planteados fue la revisión de la lista de profesiones que integran el SSMP.
A lo largo del tiempo, se han establecido 97 profesiones, oficios o trabajos especiales distintos; sin embargo, de ese total, 32 han sido eliminados, cinco cambiaron de nombre y dos se fusionaron. Actualmente, en 2025, existen 61 salarios mínimos profesionales vigentes.
Entre las profesiones listadas se encuentran:
Albañiles
Boticas, farmacias y droguerías, dependiente(a) de mostrador.
Buldózer y/o traxcavo, operador(a).
Cajero(a) de máquina registradora.
Cantinero(a) preparador de bebidas.
Carpintero(a) de obra negra.
Cocinero(a), mayor(a) en restaurantes, fondas y demás establecimientos de preparación y venta de alimentos.
Colchones, oficial en fabricación y reparación.
Colocador(a) de mosaicos y azulejos, oficial.
Electricista instalador(a) y reparador(a) de instalaciones eléctricas, oficial.
El informe presentado señala que la fijación de los primeros salarios mínimos profesionales comenzó en 1966, aunque su implementación fue discontinua. En esos años, la Comisión Nacional se encargaba de establecerlos, pero no lo hacía de forma simultánea con el salario mínimo general, lo que ha dificultado su seguimiento en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
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El objetivo de la modernización
Durante la negociación de incremento salarial para 2025 celebrada en diciembre de 2024, el presidente de la Conasami, Luis Murguía Corella, informó que se alcanzó un acuerdo con representantes de los sectores empresarial y obrero para analizar y definir una nueva tabla de profesiones sujetas a fijación salarial. En ese contexto, explicó que se trata de “modernizar la tabla de profesiones”.
Comentó que tanto la Dirección Técnica como la Conasami consideran necesaria una tabla más actualizada, que incluya nuevas profesiones y excluya aquellas que han desaparecido o tienen una baja representación en la fuerza laboral.
También subrayó la importancia de concentrarse en aquellas ocupaciones que más requieren una fijación de salario mínimo profesional.
Desde 2017, la brecha entre los salarios mínimos profesionales y el general se ha reducido significativamente. Esto se atribuye al uso del Monto Independiente de Recuperación (MIR), una herramienta utilizada para recuperar el poder adquisitivo del salario mínimo general, pero que no se aplicó a los salarios mínimos profesionales, los cuales solo han recibido incrementos cercanos a la inflación.
Ante este contexto, la propuesta de la Conasami plantea los siguientes objetivos:
Impulsar la recuperación salarial de los salarios mínimos profesionales para reducir su rezago respecto al salario mínimo general.
Homologar el catálogo del SSMP con el Sistema Nacional de Clasificación de Ocupaciones (SINCO), lo que permitiría utilizar información estadística generada por el INEGI y dar seguimiento a la evolución del poder adquisitivo y del empleo en las ocupaciones listadas.
Establecer que, en el futuro, los salarios mínimos profesionales se actualicen en el mismo porcentaje que el salario mínimo general.
Aplicar de manera periódica los criterios de inclusión y exclusión de categorías con base en el Índice de Competitividad por Ocupación (ICE).
La actualización busca atender un rezago histórico y adecuar la política salarial a las condiciones actuales del mercado laboral.
Esta iniciativa no solo tiene implicaciones en términos de justicia laboral, sino que también plantea retos para el sector empresarial en la administración de sus nóminas.
En este contexto, será fundamental que empleadores y trabajadores permanezcan atentos a los avances en la definición de la nueva tabla de profesiones y los criterios que regirán su actualización, para garantizar una adecuada implementación y cumplimiento de las disposiciones que se deriven de este proceso.
Con información de El Economista
