NOM-017: conoce los cambios y obligaciones para la protección de empleados
Desde septiembre entró en vigor la nueva NOM-017-STPS-2023, que sustituye a la versión publicada en 2008 sobre el uso de equipos de protección personal (EPP) en los centros de trabajo.
Con esta actualización, las empresas deben adecuar sus políticas de seguridad e higiene para cumplir con los nuevos lineamientos que buscan prevenir accidentes y enfermedades laborales en los lugares donde los trabajadores están expuestos a diversos riesgos.
Esta norma establece los requisitos mínimos sobre los equipos de protección que deben proporcionarse a los colaboradores.
Su aplicación implica ajustes en las políticas internas de seguridad, inversiones adicionales en equipo y la implementación de procedimientos de control, capacitación y registro documental.
Con la entrada en vigor de la NOM-017, las organizaciones deben reorganizar sus planes de seguridad e higiene para integrar estrategias que contemplen inversión, logística y productividad enfocadas en la protección de los empleados. El incumplimiento puede derivar en sanciones por parte de la autoridad laboral.
A continuación, se detallan algunos de los puntos clave de la nueva norma vigente desde el 28 de septiembre de 2025.
Inversión en equipos de protección personal certificado
Una de las principales modificaciones es la obligación de utilizar EPP certificado, acorde con las actividades, tipos y grados de riesgo de cada trabajador. El equipo debe ajustarse a la talla y características del empleado, así como a los aparatos que utilice, como anteojos, auxiliares auditivos o prótesis.
En el caso de artículos como guantes, calzado, mascarillas, tapones auditivos o ropa de protección, cada empleado deberá contar con su propio equipo, sin posibilidad de compartirlo.
Esto obliga a las empresas a presupuestar un mayor costo de adquisición, ya que además de garantizar un EPP individual, deben asegurarse de que los productos sean certificados para garantizar su efectividad.
Si el equipo se contamina con sustancias químicas o agentes biológicos, el patrón debe establecer procedimientos de descontaminación o destrucción para evitar su reutilización, lo que implica renovar los artículos cuando sea necesario.
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Responsabilidad extendida a contratistas y visitantes
La norma amplía la obligación de protección a trabajadores de servicios especializados y visitantes, como proveedores, auditores o inspectores, que ingresen a áreas donde el uso de EPP sea obligatorio.
El centro de trabajo debe proporcionar el equipo adecuado durante su estancia y asegurar que exista señalética visible y orientación sobre su uso.
Esta disposición incrementa el universo de personas a proteger y, con ello, el presupuesto destinado a seguridad.
Capacitación constante
La NOM-017 también establece que los patrones deben capacitar de forma periódica a los colaboradores sobre la identificación, uso, revisión, limpieza, mantenimiento y resguardo del EPP.
Además, los empleadores deben informar a los trabajadores sobre los riesgos específicos a los que están expuestos, para que comprendan la importancia del equipo y lo utilicen correctamente.
Las capacitaciones deberán incluir formación teórica y práctica, reforzarse al menos cada dos años y registrarse de manera formal.
Mayor registro y supervisión
Las empresas están obligadas a documentar los análisis de riesgo por puesto y área de trabajo, considerando riesgos físicos, mecánicos, químicos y biológicos.
Esta información permitirá asignar el equipo de protección adecuado y mantener un control del mantenimiento, limpieza y reposición.
El registro documental deberá incluir la determinación del equipo y ropa de trabajo por riesgo, las capacitaciones impartidas y las acciones de mantenimiento del EPP.
Con esta evidencia las empresas comprobarán su cumplimiento ante inspecciones de la autoridad laboral.
Contratación de unidades de inspección
La norma autoriza que los patrones contraten Unidades de Inspección acreditadas y aprobadas por la STPS para evaluar el cumplimiento de los lineamientos. Si el resultado es favorable, se emitirá un dictamen con una vigencia de dos años que servirá como prueba ante la autoridad.
Aunque representa un costo adicional, este servicio puede considerarse una inversión preventiva, ya que brinda certeza sobre el cumplimiento normativo y reduce el riesgo de sanciones.
La actualización de la NOM-017 representa un cambio relevante en la gestión de la seguridad laboral en México.
Es necesario que las empresas se adapten a un esquema más riguroso que priorice la protección individual, la capacitación continua y la trazabilidad documental.
Cumplir con estos requisitos no solo evita sanciones, sino que también contribuye a fortalecer la cultura de prevención y bienestar en los centros de trabajo.
